En esta fecha, no
cometamos el error de adoptar los usos y costumbres que provienen de más allá
de nuestras fronteras y disfrutemos de nuestro D. Juan Tenorio en aquellos teatros donde se represente el D. Juan Tenorio de José Zorrilla.
"Don
Juan Tenorio realiza una vil apuesta con don Luís Mejía que consiste en
conquistar en un tiempo record a una ingenua novicia y también a la novia de su
enemigo Don Luís Mejía.
Don Juan Tenorio logra cumplir sus objetivos: engaña a la novia de su rival y rapta del convento a la noble muchacha doña Inés de apenas diecisiete años. Pero sucede un hecho increíble: don Juan se enamora perdidamente de la ingenua Inés y decide pedir su mano a su padre don Gonzalo de Ulloa para casarse.
Don
Gonzalo de Ulloa y Don Luís Mejía van enfurecidos a la casa del seductor don
Juan Tenorio para encararle su vil conducta al engañar a las dos ingenuas
muchachas. Don Juan Tenorio se enfrenta a los iracundos caballeros, logrando
matar a los dos.
El mujeriego don Juan huye despavorido, abandonando a doña Inés, quien muere de pena. A su regreso, después de muchos años, don Juan Tenorio, se encuentra con un panteón en lo que antes había sido su hogar, allí se encuentran enterrados sus victimas y su adorada Inés.
El mujeriego don Juan huye despavorido, abandonando a doña Inés, quien muere de pena. A su regreso, después de muchos años, don Juan Tenorio, se encuentra con un panteón en lo que antes había sido su hogar, allí se encuentran enterrados sus victimas y su adorada Inés.
Don Juan Tenorio completamente arrepentido pide perdón. Cuando las almas de sus antiguas víctimas estaban a punto de llevárselo al infierno, apareció en ese instante el espectro de doña Inés, impidiendo que se lo lleven y salvando su alma".
Os invito a presenciar una representación televisiva de esta inmortal pieza teatral.