Muchas veces pienso ahora
si valió o no la pena ir a morirse en la guerra de Ifni.
Con el transcurso de los
años, ahora que llego despacio a los ochenta años, lleno de achaques, me vienen
a la memoria los nombres de mis compañeros paracaidistas que murieron jóvenes
en la ignorada guerra de Ifni.
Quiero pensar que no
murieron por nada.
Ellos eran madrileños,
catalanes, vascos, andaluces, canarios y qué sé yo de cuantos diferentes
lugares de mi querida España.
Y quiero que sepan los politiquillos de ahora que
nunca hubo entre nosotros problemas de odio racial. Todo lo contrario.
Éramos todos muy jóvenes
y no estábamos corrompidos como ahora está la
juventud, los adultos y hasta los
viejos gracias a los políticos que ahora nos mal gobiernan.
Ellos no crecieron hasta
ser viejos como hemos crecido nosotros.
La edad no les pesará, ni
los años les condenaran como el sol que baja y vuelve a salir por la mañana.
Les recordaremos siempre.
Nunca podremos
olvidarles.
Yo nunca les olvido.